Voy al nuevo blog Dosis Musical, y leo acerca del fichaje de Douglas Merril, ex de Google, por EMI Music. Alguien en EMI ha dado un paso más adelante que simplemente admitir que la industria musical ha cambiado. Ahora toca cambiar equipo en la empresa, e incorporar personal que entiende internet como medio eficaz para distribuir música, porque los cambios en una empresa los hacen las personas que saben del negocio. Han dado el primer paso, y recortado su personal por 2000 personas, reduciendo la plantilla hasta un 60%.
Camino por la blogoesfera, y me encuentro con otras dos noticias. La última eclipsará la lectura, así que mencionemos la menos sonada por delantado. IanCR abandona Yahoo Music y se mete de lleno en un proyecto startup cuya finalidad es ayudar a los artistas independientes a difundir su música por la red. Se llama TopSpinMedia, pero de momento no ofrece mucha información, y sí muchos puestos de trabajo en EEUU. Buenas oficinas de trabajo, eso sí – foto superior-.
Apple compra Universal Music o_O, anunciaba Bob Lefsetz ayer. El artículo no tiene desperdicio. Steve Jobs, CEO de Apple estaba harto de verse obligado a tener que ceder a la presión de las discográficas, que imponían un precio final al consumidor de 0,99€ por canción, a sabiendas de que el negocio jamás progresaría de este modo. Steve, persona nacida para dar la vuelta a este mundo, llevaba tiempo buscando una salida a esta situación, y elige Universal Music – subsidiaria de Vivendi Universal – por tener el disponer del mayor catálogo musical. A partir del 15 de abril, éste catálogo costará 0,15€ por canción. EMI, destino de Douglas Merril, venderá al mismo precio.
El artículo de Mr. Lefsetz no tiene ni desperdicio ni fondo en todo lo que se cuece en la industria. Augura fracaso para la nueva relación Madonna/Live Nation, y señala a Steve Jobs como sabedor de que los grandes directos no tienen futuro, simplemente porque no habrá quien financie producciones de tal calibre. Augura buen futuro para el artista independiente, que vende exclusivamente gracias a su música, y no una producción artificial.